El jueves pasado, 4 de abril, tuvo lugar la presentación "oficial" de nuestra Plataforma, mediante una rueda de prensa celebrada en el Hotel Chiqui de Santander. Os transcribimos, íntegras, las palabras de Mariana García de Alvear, coordinadora de Cantabria, Educación y Libertad:
"Buenos días y muchas gracias por vuestra asistencia.
Os hemos convocado hoy aquí para presentar oficialmente a los medios de comunicación y a la sociedad, una iniciativa que un grupo de padres de Cantabria, muy preocupados por la educación de nuestros hijos, hemos decidido poner en marcha.
CANTABRIA EDUCACIÓN Y LIBERTAD nace en defensa de la libertad en la educación y en defensa del derecho irrenunciable e intransferible de los padres a elegir la educación de sus hijos.
Somos una plataforma civil, aconfesional y no vinculada a ningún partido político, formada mayoritariamente por padres y madres de familia cuyos hijos cursan estudios tanto en centros públicos como en centros concertados.
En nuestra comunidad autónoma se empezó a impartir en este curso la asignatura de Educación para la ciudadanía. Por ello creemos que es el momento adecuado para tener claras las cosas y actuar en consecuencia.
Esta Plataforma que defiende la Objeción de Conciencia frente a la asignatura denominada genéricamente “Educación para la Ciudadanía”. Se trata de una campaña que apoyan más de cuarenta asociaciones de toda España, entre ellas Profesionales por la Ética, cuyo coordinador de la asesoría jurídica, José Luis Bazán, nos acompaña hoy aquí.
Desde el comienzo del curso hemos estado informándonos sobre la implantación y contenido de la asignatura. Tras analizar los Reales Decretos y las normas autonómicas que regulan su estructura, contenidos, objetivos y criterios de evaluación, consideramos que gran parte de ellos son contrarios a los valores en los que queremos educar a nuestros hijos
La imposición de la asignatura, tal como está planteada en España, supone una intromisión intolerable en el derecho constitucional de los padres a educar a nuestros hijos conforme a nuestras convicciones morales, tal como recoge el artículo 27.3 de la Constitución, según el cual: “Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones”. En idéntico sentido se tutela el mencionado derecho en otros tantos textos internacionales, como el artículo 26.3 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, el Artículo 14.3 de la Carta Europea de Derechos Fundamentales, o el Artículo 2 del Protocolo I del Convenio Europeo de Derecho Humanos, entre otros.
Es más, consideramos que el Estado, desoyendo todas las voces que durante el proceso de desarrollo de la asignatura se opusieron a la misma tal como se estaba planteando, incluido los dictámenes en contra del propio Consejo de Estado, y con su imposición en estos términos, está tratando de expropiar a los padres la responsabilidad y el derecho a la educación de nuestros hijos. Mediante esta asignatura el Estado busca apropiarse de la formación de las conciencias.
Por estas razones hemos creado esta Plataforma en Cantabria. El objetivo de la misma, como ya hemos dicho, es defender la libertad de los padres a educar a nuestros hijos según nuestras propias convicciones, y no dejar la formación de la conciencia moral de nuestros hijos en manos del Gobierno de turno. Hay demasiadas evidencias de que esta materia puede convertirse, y de hecho así está siendo en algunos centros de esta comunidad, en un instrumento de manipulación ideológica y adoctrinamiento por parte del Estado, que quiere convertirse en formador moral de los niños y jóvenes, imponiendo a todos ellos una visión ideológica de la persona y de la vida. Defender la conciencia de nuestros hijos es una responsabilidad a la que los padres no podemos renunciar.
Pero más allá de los contenidos concretos, lo grave y preocupante de esta asignatura obligatoria, evaluable y computable, es que pretende, tal como indica el propio Ministerio de Educación, “ayudar a los alumnos a construirse una conciencia moral”, algo que, indudablemente, no le compete.
Ante la gravedad de esta situación, los padres tenemos el derecho y la responsabilidad de impedir ese intento de adoctrinamiento, y defender a nuestros hijos para que no se les imponga una orientación moral determinada que lesiona nuestras convicciones.
Dado que, actualmente, la asignatura es obligatoria por mandato legal, y tras analizar las diferentes opciones, el único recurso inmediato en manos de los padres para ejercer nuestros derechos a la libertad de educación y a la libertad ideológica, es ejercer nuestro derecho a la objeción de conciencia. El derecho a la objeción de conciencia es, en este momento, el instrumento legal más adecuado para defender nuestro derecho como padres a la libertad de educación e impedir la manipulación ideológica de nuestros hijos, evitando así que asistan a las clases de esta asignatura. Se trata de un derecho constitucional que las autoridades educativas están obligadas a respetar, y que, en un Estado de Derecho, no puede suponer ningún perjuicio para nadie.
Ejercitando el derecho a la objeción de conciencia, optamos por la defensa de nuestros hijos. Los padres objetores no van contra los colegios sino contra la implantación y los contenidos de esta asignatura.
En toda España se han presentado más de 27.000 objeciones, y concretamente en Cantabria se han presentado ya --- objeciones de conciencia frente a dicha asignatura en varios colegios, tanto públicos como concertados. Desde aquí animamos a más padres a que, en el ejercicio de su libertad, se sumen a esta iniciativa y presenten la objeción de conciencia por sus hijos.
Nuestra plataforma ha iniciado una campaña de información impartiendo conferencias informando sobre el tema en los colegios de Cantabria que lo solicitan a través de las APAS.
Asimismo, ofrecemos apoyo y asesoramiento jurídico gratuito, respaldados por Profesionales por la Ética, a todos aquellos padres que opten por ejercitar su derecho a la objeción de conciencia. Estamos ante un gran reto, y es mucho lo que está en juego. Los padres no podemos permitir que nadie nos quite la libertad de educar a nuestros hijos. Es la hora de la responsabilidad y del compromiso de los padres.
Reiteramos nuestro agradecimiento por vuestra asistencia y estamos a vuestra entera disposición.
Muchas gracias."
