En respuesta a aquellos que se empeñan en presentar Educación para la Ciudadanía como una asignatura neutra, limitada a la enseñanza de conocimientos sobre las instituciones democráticas, los Derechos Humanos o la seguridad vial, traemos hoy a este espacio un extracto del Decreto de 25 de Mayo de 2007 del Boletín Oficial de Cantabria, por el que se regula esta asignatura en nuestro sistema educativo:
“La Educación para la ciudadanía tiene como objetivo favorecer el desarrollo de personas libres e íntegras a través de la consolidación de la autoestima, la dignidad personal, la libertad y la responsabilidad, y la formación de futuros ciudadanos con criterio propio, respetuosos, participativos y solidarios, que conozcan sus derechos, asuman sus deberes y desarrollen hábitos cívicos para que puedan ejercer la ciudadanía de forma eficaz y responsable.
Esta nueva materia se propone que la juventud aprenda a convivir en una sociedad plural y globalizada en la que la ciudadanía, además de los aspectos civiles, políticos y sociales que ha ido incorporando en etapas históricas anteriores, incluya como referente la universalidad de los derechos humanos que, reconociendo las diferencias, procuran la cohesión social.
Para lograr estos objetivos se profundiza en los principios de ética personal y social y se incluyen, entre otros contenidos, los relativos a las relaciones humanas y a la educación afectivo-emocional, los derechos, deberes y libertades que garantizan los regímenes democráticos, las teorías éticas y los derechos humanos como referencia universal para la conducta humana, los relativos a las superación de conflictos, la igualdad entre hombres y mujeres, las características de las sociedades actuales, la tolerancia y la aceptación de las minorías y de las culturas diversas”
“La Educación para la ciudadanía tiene como objetivo favorecer el desarrollo de personas libres e íntegras a través de la consolidación de la autoestima, la dignidad personal, la libertad y la responsabilidad, y la formación de futuros ciudadanos con criterio propio, respetuosos, participativos y solidarios, que conozcan sus derechos, asuman sus deberes y desarrollen hábitos cívicos para que puedan ejercer la ciudadanía de forma eficaz y responsable.
Esta nueva materia se propone que la juventud aprenda a convivir en una sociedad plural y globalizada en la que la ciudadanía, además de los aspectos civiles, políticos y sociales que ha ido incorporando en etapas históricas anteriores, incluya como referente la universalidad de los derechos humanos que, reconociendo las diferencias, procuran la cohesión social.
Para lograr estos objetivos se profundiza en los principios de ética personal y social y se incluyen, entre otros contenidos, los relativos a las relaciones humanas y a la educación afectivo-emocional, los derechos, deberes y libertades que garantizan los regímenes democráticos, las teorías éticas y los derechos humanos como referencia universal para la conducta humana, los relativos a las superación de conflictos, la igualdad entre hombres y mujeres, las características de las sociedades actuales, la tolerancia y la aceptación de las minorías y de las culturas diversas”
Los objetivos ("desarrollo de personas libres e íntegras","formación de futuros ciudadanos con criterio propio", "que la juventud aprenda a convivir en una sociedad plural" .... ) no son malos objetivos, sin duda, pero
¿es el Estado el que debe "formar" a los ciudadanos?
¿es el Estado el encargado de enseñar a los jóvenes cómo usar de su libertad?
¿debe estar en manos del Estado la educación afectivo-emocional de nuestros hijos?
1 comentario:
Yo, rotundamente, quiero objetar por mis hijas. Pero me gustaría que me aclaraseis una duda: ¿puedo objetar ya aunque mis hijas están en Educación Infantil o tengo que esperar a que lleguen al curso en el que se imparte EcP? En caso de no poder objetar, dos cosas: ¿que podemos hacer las familias con hijos de esas edades (infantil, primaria, secundaria)? Y ¿cómo es posible que no podamos objetar cuando nosotros llevamos a nuestros hijos a un colegio por un ideario que se desarrolla desde infantil hasta la ESO? Sabiendo además, que en el futuro de seguir adelante la asignatura nuestros hijos terminarán afectados por este tema. ¡Tenemos que hacer fuerza ahora!
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